Palanca y camino para la bendición
Hebreos 5:8-10
'Y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia; y habiendo sido perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen; y fue declarado por Dios sumo sacerdote según el orden de Melquisedec.'
La Palabra de Dios tiene muchísimas bendiciones. Hay para lo que deseemos. Pero muchas veces nos enfocamos en lo que recibiremos olvidando que pasos debemos realizar para obtener dicha bendición.
Es claro que Dios es soberano y para Él todo es posible (Marcos 10:27), pero, dado que tú y yo tenemos la capacidad, Dios va dejar siempre que hagamos nuestra parte y Él hará su parte. Del ser obedientes en realizar lo que tenemos que hacer depende muchas veces la bendición.
Vamos leer unos cuantos versículos en la Palabra para corroborar lo anteriormente descrito:
1. Sabemos bien que hizo Jesús pero ¿Qué hicieron los discípulos?: “Entonces mandó a la multitud que se recostase en tierra; y tomando los siete panes, habiendo dado gracias, los partió, y dio a sus discípulos para que los pusiesen delante; y los pusieron delante de la multitud. Tenían también unos pocos pececillos; y los bendijo, y mandó que también los pusiesen delante.” (Marcos 8:6-7)
2. Maravilloso lo que hizo Jesús pero ¿Qué hizo Pedro?: “Cuando llegaron a Capernaum, vinieron a Pedro los que cobraban las dos dracmas, y le dijeron: ¿Vuestro Maestro no paga las dos dracmas? El dijo: Sí. Y al entrar él en casa, Jesús le habló primero, diciendo: ¿Qué te parece, Simón? Los reyes de la tierra, ¿de quiénes cobran los tributos o los impuestos? ¿De sus hijos, o de los extraños? Pedro le respondió: De los extraños. Jesús le dijo: Luego los hijos están exentos. Sin embargo, para no ofenderles, ve al mar, y echa el anzuelo, y el primer pez que saques, tómalo, y al abrirle la boca, hallarás un estatero; tómalo, y dáselo por mí y por ti.” (Mateo 17:24-27)
3. Sabemos la palabra que determinó Dios por medio de Eliseo pero ¿Que hizo Naamán?: “10 Entonces Eliseo le envió un mensajero, diciendo: Ve y lávate siete veces en el Jordán, y tu carne se te restaurará, y serás limpio. 14 El entonces descendió, y se zambulló siete veces en el Jordán, conforme a la palabra del varón de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño, y quedó limpio.” (2 Reyes 5:10,14)
4. Sabemos lo que hizo Jehová en el mar rojo pero ¿que hicieron Moisés y el pueblo?: “15 Entonces Jehová dijo a Moisés: ¿Por qué clamas a mí? Di a los hijos de Israel que marchen. 16 Y tú alza tu vara, y extiende tu mano sobre el mar, y divídelo, y entren los hijos de Israel por en medio del mar, en seco. 21 Y extendió Moisés su mano sobre el mar, e hizo Jehová que el mar se retirase por recio viento oriental toda aquella noche; y volvió el mar en seco, y las aguas quedaron divididas. 22 Entonces los hijos de Israel entraron por en medio del mar, en seco, teniendo las aguas como muro a su derecha y a su izquierda.” (Éxodo 14:15-16,21-22)
Y así encontraremos muchos y muchos más episodios donde el común denominador es la obediencia. Dios hará su parte y nosotros la que nos corresponda.
Así que hoy quiero recordar que Dios tiene para ti esa bendición, ese milagro pero tal como los 10 leprosos, Dios necesita que hagas tu parte! (Lucas 17:12-14). Que así como Dios hizo con Lázaro, Dios necesita de nosotros que seamos obedientes y hagamos lo que se nos encomendó hacer… De nosotros es el quitar la piedra y el de Dios obrar la bendición y el milagro (Juan 11:38-40).
Y último, Sabemos bien lo que ha hecho y hace el Señor pero... ¿Qué debemos hacer tu y yo?
Dios te bendiga y que tengas un excelente día en Cristo Jesús!
'Y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia; y habiendo sido perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen; y fue declarado por Dios sumo sacerdote según el orden de Melquisedec.'
La Palabra de Dios tiene muchísimas bendiciones. Hay para lo que deseemos. Pero muchas veces nos enfocamos en lo que recibiremos olvidando que pasos debemos realizar para obtener dicha bendición.
Es claro que Dios es soberano y para Él todo es posible (Marcos 10:27), pero, dado que tú y yo tenemos la capacidad, Dios va dejar siempre que hagamos nuestra parte y Él hará su parte. Del ser obedientes en realizar lo que tenemos que hacer depende muchas veces la bendición.
Vamos leer unos cuantos versículos en la Palabra para corroborar lo anteriormente descrito:
1. Sabemos bien que hizo Jesús pero ¿Qué hicieron los discípulos?: “Entonces mandó a la multitud que se recostase en tierra; y tomando los siete panes, habiendo dado gracias, los partió, y dio a sus discípulos para que los pusiesen delante; y los pusieron delante de la multitud. Tenían también unos pocos pececillos; y los bendijo, y mandó que también los pusiesen delante.” (Marcos 8:6-7)
2. Maravilloso lo que hizo Jesús pero ¿Qué hizo Pedro?: “Cuando llegaron a Capernaum, vinieron a Pedro los que cobraban las dos dracmas, y le dijeron: ¿Vuestro Maestro no paga las dos dracmas? El dijo: Sí. Y al entrar él en casa, Jesús le habló primero, diciendo: ¿Qué te parece, Simón? Los reyes de la tierra, ¿de quiénes cobran los tributos o los impuestos? ¿De sus hijos, o de los extraños? Pedro le respondió: De los extraños. Jesús le dijo: Luego los hijos están exentos. Sin embargo, para no ofenderles, ve al mar, y echa el anzuelo, y el primer pez que saques, tómalo, y al abrirle la boca, hallarás un estatero; tómalo, y dáselo por mí y por ti.” (Mateo 17:24-27)
3. Sabemos la palabra que determinó Dios por medio de Eliseo pero ¿Que hizo Naamán?: “10 Entonces Eliseo le envió un mensajero, diciendo: Ve y lávate siete veces en el Jordán, y tu carne se te restaurará, y serás limpio. 14 El entonces descendió, y se zambulló siete veces en el Jordán, conforme a la palabra del varón de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño, y quedó limpio.” (2 Reyes 5:10,14)
4. Sabemos lo que hizo Jehová en el mar rojo pero ¿que hicieron Moisés y el pueblo?: “15 Entonces Jehová dijo a Moisés: ¿Por qué clamas a mí? Di a los hijos de Israel que marchen. 16 Y tú alza tu vara, y extiende tu mano sobre el mar, y divídelo, y entren los hijos de Israel por en medio del mar, en seco. 21 Y extendió Moisés su mano sobre el mar, e hizo Jehová que el mar se retirase por recio viento oriental toda aquella noche; y volvió el mar en seco, y las aguas quedaron divididas. 22 Entonces los hijos de Israel entraron por en medio del mar, en seco, teniendo las aguas como muro a su derecha y a su izquierda.” (Éxodo 14:15-16,21-22)
Y así encontraremos muchos y muchos más episodios donde el común denominador es la obediencia. Dios hará su parte y nosotros la que nos corresponda.
Así que hoy quiero recordar que Dios tiene para ti esa bendición, ese milagro pero tal como los 10 leprosos, Dios necesita que hagas tu parte! (Lucas 17:12-14). Que así como Dios hizo con Lázaro, Dios necesita de nosotros que seamos obedientes y hagamos lo que se nos encomendó hacer… De nosotros es el quitar la piedra y el de Dios obrar la bendición y el milagro (Juan 11:38-40).
Y último, Sabemos bien lo que ha hecho y hace el Señor pero... ¿Qué debemos hacer tu y yo?
Dios te bendiga y que tengas un excelente día en Cristo Jesús!
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