¿Más excusas para no asistir a la iglesia?
Salmos 133:1
“!!Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía!”
“Yo me alegré con los que me decían: A la casa de Jehová iremos.” (Salmos 122:1)
Porque en la casa del Señor:
- Puedo contemplar su hermosura: “Lo único que le pido al Señor —lo que más anhelo— es vivir en la casa del Señor todos los días de mi vida, deleitándome en la perfección del Señor y meditando dentro de su templo.” (Salmos 27:4 NTV)
- Puedo adorar al Rey de Reyes: “Luego levantará mi cabeza sobre mis enemigos que me rodean, Y yo sacrificaré en su tabernáculo sacrificios de júbilo; Cantaré y entonaré alabanzas a Jehová.” (Salmos 27:6)
- Puedo dar gracias a Dios por cada bendición recibida: “ni palabras deshonestas, ni necedades, ni truhanerías, que no convienen, sino antes bien acciones de gracias.”(Efesios 5:4) “dando siempre gracias por todo al Dios y Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.” (Efesios 5:20)
- Podemos animarnos los unos con los otros: “Por lo cual, animaos unos a otros, y edificaos unos a otros, así como lo hacéis.” (1 Tesalonicenses 5:11) “También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos.” (1 Tesalonicenses 5:14)
- Porque el día del Señor esta cerca: “Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos.” (Romanos 13:11)
- Y: “...Porque allí envía Jehová bendición, Y vida eterna.” (Salmos 133:3b)
¿Será que queremos perdernos todo esto? ¿Seguiremos sacando excusas para no ir?
Recordemos que la clave entonces es:
“no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.” (Hebreos 10:25)
Tomemos una decisión hoy y saquémosle tiempo al dueño del tiempo.
“!!Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía!”
“Yo me alegré con los que me decían: A la casa de Jehová iremos.” (Salmos 122:1)
Porque en la casa del Señor:
- Puedo contemplar su hermosura: “Lo único que le pido al Señor —lo que más anhelo— es vivir en la casa del Señor todos los días de mi vida, deleitándome en la perfección del Señor y meditando dentro de su templo.” (Salmos 27:4 NTV)
- Puedo adorar al Rey de Reyes: “Luego levantará mi cabeza sobre mis enemigos que me rodean, Y yo sacrificaré en su tabernáculo sacrificios de júbilo; Cantaré y entonaré alabanzas a Jehová.” (Salmos 27:6)
- Puedo dar gracias a Dios por cada bendición recibida: “ni palabras deshonestas, ni necedades, ni truhanerías, que no convienen, sino antes bien acciones de gracias.”(Efesios 5:4) “dando siempre gracias por todo al Dios y Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.” (Efesios 5:20)
- Podemos animarnos los unos con los otros: “Por lo cual, animaos unos a otros, y edificaos unos a otros, así como lo hacéis.” (1 Tesalonicenses 5:11) “También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos.” (1 Tesalonicenses 5:14)
- Porque el día del Señor esta cerca: “Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos.” (Romanos 13:11)
- Y: “...Porque allí envía Jehová bendición, Y vida eterna.” (Salmos 133:3b)
¿Será que queremos perdernos todo esto? ¿Seguiremos sacando excusas para no ir?
Recordemos que la clave entonces es:
“no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.” (Hebreos 10:25)
Tomemos una decisión hoy y saquémosle tiempo al dueño del tiempo.
0 Comments