El Dios de paz ... ¿Lo conoces?
Números 6:24-27
“Jehová habló a Moisés, diciendo: Habla a Aarón y a sus hijos y diles: Así bendeciréis a los hijos de Israel, diciéndoles: Jehová te bendiga, y te guarde; Jehová haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; Jehová alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz. Y pondrán mi nombre sobre los hijos de Israel, y yo los bendeciré.”
La paz, es un estado de armonía que esta libre de guerras, conflictos y contratiempos, y a decir verdad, todos anhelamos este estado de tranquilidad y seguridad en nuestro país, hogar y persona. Sin embargo, el hombre ha gastado gran parte de su vida tratando de conseguirla mediante sus propios medios y sea cual sea la estrategia que planeemos sin Dios, debemos tener presente que estamos perdiendo el tiempo y nuestros esfuerzos serán inútiles.
La Palabra de Dios es clara en como podemos hallarla y para esto debemos primero, entender que nuestro Dios es Dios de Paz “Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.” (Filipenses 4:7), el Hijo es príncipe de paz “Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.” (Isaías 9:6) y con ayuda de la unidad del Espíritu Santo podemos tener ese vínculo de la paz “Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuisteis llamados, con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor, solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz” (Efesios 4:1-3).
Lo segundo que debemos entender es que “Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.” (Romanos 5:12), estábamos condenados y no había nada que pudiéramos hacer… pero gracias a que “Dios envió mensaje a los hijos de Israel, anunciando el evangelio de la paz por medio de Jesucristo; éste es Señor de todos.” (Hechos 10:36) Él “ ... vino y anunció las buenas nuevas de paz a vosotros que estabais lejos, y a los que estaban cerca” (Efesios 2:17). Así es… alguien fue un instrumento de Dios para anunciarnos la paz de Dios, reconciliación con el Señor, que es que hoy en Jesucristo tenemos redención y perdón de pecados, así que “con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz; el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo, en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.” (Colosenses 1:12-14)
Y tercero, esa misma paz que Dios nos ha dado, Él desea que la tengan todos! “Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.” (2 Pedro 3:8-9) Él no quiere que nadie se pierda “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.” (Juan 3:16-17)… ¿Qué diferente a la paz que el mundo brinda no? “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.” (Juan 14:27)
Por ello, entendamos que cuando creemos en Dios, nos arrojamos a sus brazos, dependemos de Él, permanecemos en Él… ciertamente su paz (que nunca se debilitará) habita en nosotros! Por lo tanto, toda aflicción, angustia, turbación, pánico o temor queda vencida por nuestra fe firme en Jesucristo!
¿Tenemos estos 3 puntos claros? Si es así entonces excelente! Pero… ¿Conocemos de alguien que no conoce al Dios de paz? ¿Por qué no se lo compartimos? (Romanos 10:15) Así logrará tener paz en la tormenta!
Dios te bendiga y que tengas un excelente día en Cristo Jesús!
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